Las asanas elegidas trabajan la simetría del cuerpo, alargan las cadenas musculares retraídas actuando en simultáneo sobre las fascia y así liberando también  las articulaciones y por lo tanto el movimiento.
YPB® no contempla ni retroflexiones, ni asanas invertidas. Sólo se realizan las posturas laterales y torsiones que no generen compensaciones en otras áreas del cuerpo.

Todas las posturas son consistentes con la anatomía y nos acercan a nuestra forma natural.

El YPB® libera nuestro potencial dormido, despierta nuestra escucha interior y la intuición para vivir nuestra vida cotidiana en plenitud.